Por Ramón Mercedes
NUEVA YORK.- El presidente de Alianza País, Guillermo Moreno, hizo un llamado en esta ciudad al gobierno encabezado por el presidente Luis Abinader, para que se comprometa a establecer un “Nuevo Trato” con la comunidad dominicana residente en el exterior.
“El gobierno debe respetar su dignidad, reconocerle los inmensos aportes que hacen al país, definir planes concretos para fomentar las inversiones, el retorno y seguridad jurídica; estrechar lazos culturales e intercambios académicos, que los consulados y embajadas faciliten las relaciones institucionales de los dominicanos con su país”, precisa Moreno en un artículo de opinión.
Sostuvo que apoya y asume la propuesta hecha por Radhamés Pérez, Coordinador de los Equipos Políticos de AlPaís en el exterior, en la vista pública realizada por la Cámara de Diputados de la RD en NY, el pasado 22 de octubre.
Que el banco oficial del Estado (de Reservas) abra oficinas en las ciudades con alta población de dominicanos para eliminar los costos de envío, crear un sistema de orientación y apoyo para el fortalecimiento de la seguridad y garantías jurídicas para proteger los bienes y propiedades adquiridas por los emigrados en RD.
Esto para contrarrestar las estafas y engaños de las que con frecuencia son víctimas los dominicanos del exterior. Además, crear incentivos especiales y liberar del pago de altas tasas de interés para atraer inversiones de dominicanos no residentes.
También, la creación de mecanismos legales y administrativos que faciliten la colocación en el mercado de consumidores de las comunidades dominicanas de productos criollos, sobre todo agropecuarios.
Pero, el gobierno debe invertir en infraestructuras físicas, tecnología, investigación, acompañados de sistemas fitosanitarios que garanticen el cumplimiento de requerimientos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU y su homóloga de la Unión Europea.
Uno de los mayores deseos de los quisqueyanos residentes en el exterior es que el gobierno abarate el costo de los servicios consulares, y establecer un sueldo fijo adecuado para los cónsules y eliminar la práctica de la apropiación por el cónsul del 20 % de los ingresos consulares, siendo esta práctica una de las causas de sus elevados costos.
"La diáspora, por su peso en la economía nacional y su crecimiento en todos los órdenes, si supera su actual nivel de dispersión, está llamada a ser un motor fundamental en las reformas y transformaciones que demanda la RD", puntualiza Moreno.