Nueva York.- La diáspora dominicana salió el domingo a las calles de Nueva York celebrar su primer desfile, con la participación del senador Estatal Robert Jackson, y tras la pandemia festejaron por todo lo alto con música, folclor y algarabía los logros en Estados Unidos, donde han ganado poder político y económico como dueños de talleres, salones de belleza, peluquerías, taxis, bodegas, restaurantes,
cadenas de supermercados entre otros
Portando su bandera o vestidos con sus colores rojo, azul y blanco, miles de dominicanos abarrotaron la Sexta Avenida de Manhattan, en la que se escuchó el sonido de la tambora, el güiro y el acordeón, instrumentos básicos en el merengue, ritmo autóctono del país, que resonó con fuerza, en el 40 aniversario del desfile.
También se escucharon los ritmos urbanos en un día en que las temperaturas se confabularon con los criollos y festejaron su presencia en este país, que acoge el 75 % de esta emigración, radicados en su mayoría en Nueva York.
«¡Dominicanos!» y «¡Que viva Santo Domingo!» como se conoce a la República Dominicana aunque es el nombre de su capital, gritaban desde las carrozas provocando ensordecedores gritos de los asistentes, en su mayoría jóvenes.
* Desde 1991, cuando se eligió en Nueva York al primer dominicano, Guillermo Linares, al Concejo de la ciudad, y el primero también electo a nivel nacional, esta comunidad ha avanzado en la política y también en el mundo de los negocios