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El norte de nuestra política debe ser erradicar el desempleo y rescatar la soberanía. En especial, erradicar el desempleo en las provincias. Vivimos en un mundo multipolar, ya no hay poder hegemónico, nuestros amigos internacionales, deben ser los que coincidan con nuestros intereses, y los enemigos los contrarios.
Cualquier país que apoye la fusión RD con Haití es nuestro enemigo. Debe recibir el trato de tal. Nuestra libertad fue conseguida a machete y plomo, y así la mantendremos a futuro. Los traidores a la patria, viven su último round, de castigo pacifico-legal, sino de seguro serán, debidamente castigados por la indignación popular.
Es tiempo de proteger nuestro pueblo, en especial, nuestros jóvenes y niños. Es especial controlando el mensaje que reciben de los medios. Hay que crear leyes. Sin importarnos lo que planteen los defensores de la libertad de prensa, ideología de género, derechos Humanos, y otros. Hay que hacer lo que conviene, y poner el pecho al resto.
No podemos continuar con familias dominicanas desempleadas y con hambre y miles de tareas abandonadas. O con miles de haitianos ocupando los empleos que deben tener los dominicanos. Ni importando productos que podemos producir aquí, construyendo las fábricas correspondientes.
Lo que demandamos de los políticos, debemos estar en disposición de exigir en las calles. Los mandatarios pueden tener compromisos y presiones que el pueblo no tiene. Y el verdadero poder es el del pueblo en las calles. No más desorden migratorio. Deportación y construcción MURO.
Un desempleado, es una máquina de generar riqueza subutilizada. No debe haber desempleado a nuestra patria; ya sea convertirlo en productor agrícola, pecuario, acuícola, pesquero, obrero, emprendedor, microempresario, etc. Pero a ese objetivo deben enfocarse los recursos.
Propongo, comencemos repartiendo los terrenos del CEA, repartiendo de 100 tareas por familias y convirtiéndolos en productores de caña. Y tomar prestado si es necesario para re-instalar ingenios modernos, donde estaban los desmantelados. Y construir agroindustrias municipales.
Debemos tener claro que el principal activo económico del país son los empresarios; por su formación, experiencia, capital, y crédito. Con ellos el Estado debe facilitarles con crédito, apoyo fiscal, impulsar la construcción de las industrias necesarias para sustituir importaciones, por producción local.
Estamos en el deber y la obligación de erradicar el mas de lo mismo, que son; pésima educación publica, ausencia de formación técnica, obstáculos para accesar a crédito, impuestos a emprendedores, burocracia y corrupción pública, etc.
RD está en guerra multifacética y la estamos perdiendo. Siendo invadidos por los haitianos, nuestros ciudadanos perdiendo empleos, deforestando nuestros bosques, secando nuestros ríos, nuestra población emigrando, los políticos robando sin piedad, los jueces limpiándose con la justicia. Es una guerra que todavía la podemos ganar.