EFE
PUERTO PRÍNCIPE, HAITI.La primera dama recibió atención médica en un hospital local antes de ser trasladada en avión a Miami.
"En un abrir y cerrar de ojos, los mercenarios entraron en mi casa y acribillaron a mi marido (...) sin darle siquiera la oportunidad de decir una sola palabra", dijo Martine Moise en el mensaje.
El presidente del país más pobre de América estaba luchando, dijo, por "las carreteras, el agua y la electricidad, el referéndum y las elecciones previstas para finales de año".
"Esta es una batalla que él libraba por nosotros, debemos continuar", aseguró.
El asesinato de Jovenel Moise amenaza con sumir a Haití en el caos y la comunidad internacional ha pedido al país caribeño que mantenga las elecciones presidenciales y legislativas previstas para septiembre y noviembre.
"No los abandonaré", recalcó Martine Moise.
