5 de 5 OMS ALARMA Y ATERROZIZA La salud ha sido una preocupación constante de las naciones, por eso desde hace largo tiempo se planteó la ne...
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OMS ALARMA Y ATERROZIZA
La salud ha sido una preocupación constante de las naciones, por eso desde hace largo tiempo se planteó la necesidad de crear un organismo de carácter mundial para enfrentar las epidemias y pandemias que se han registrado a lo largo de la historia de la humanidad.
Ese papel lo desempeña actualmente la Organización Mundial de la Salud (OMS), creada el 7 de abril de 1948, como dependencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con sede en Ginebra, Suiza, la cual ha trabajado en la erradicación de la viruela, lepra, poliomielitis, cólera, malaria, tuberculosis, Sida, planificación familiar, inmunización infantil, disminución de las tasas de morbilidad materna y otras afecciones.
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| El doctor Fauci, director de enfermedades infeccionsas de Estados Unidos y el presidente de la Organizacion Mundial de la Salud (OMS) |
La idea de crear un órgano mundial dedicado a temas de salud nace desde 1845, se profundizó en 1919, a raíz de terminada la primera guerra mundial que dio paso a la creación de la Sociedad de las Naciones, embrión de lo que es hoy la ONU y que, para tratar los temas sanitarios creó la Oficina Internacional de Higiene Pública.
La OMS admite todos los estados soberanos, incluidos aquellos que no pertenecen a ONU, incluso territorios que no son autónomos, los primeros como miembros plenos y los segundos como asociados. Cuenta con 196 países miembros, incluyendo dos observadores.
Su órgano principal es la Asamblea Mundial de la Salud, la cual se reúne una vez al año en Ginebra. Su más reciente sesión fue justamente este mes de mayo. Tiene también una Junta Ejecutiva de 34 expertos en salud, elegidos por su Asamblea y una Secretaría, dirigida por un director general.
La organización cuenta con unos 7 mil empleados diseminados en 150 países, con 6 oficinas regionales y la sede central, ubicada en Ginebra. Las regionales funcionan en África, Las Américas, Asia, Europa, Mediterráneo Oriental y Pacífico Occidental.
Como paradoja, vale destacar que la OMS declaró este 2020 como Año Internacional del Personal de Enfermería y Partería, ni por asomo tenía la idea de cómo serían afectadas las médicos y enfermeras, debido al COVID-19.
El país cuenta con una representante de la Oficina Panamericana de la Salud (OPS) y es la doctora Alma Morales, quien ha laborado conjuntamente con las autoridades sanitarias dominicanas en todo lo concerniente al COVID-19, haciendo puntualizaciones sobre ese proceso, con resultados aceptables, ya que el número de contagiados y fallecidos aquí no es tan alto como en otras naciones del hemisferio.
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| El presidente de la Organizacion Mundial de la Salud y el Primer Ministro de China |
El actual director general de la OMS, es Tedros Adhanom Ghebreyesus, etíope, nacido en Asmara, Eritrea, en marzo de 1965, quien fue elegido en mayo de 2017, en la 70 Asamblea Mundial de Salud. Es el primer africano que ocupa el principal cargo administrativo y técnico del organismo. Asumió el primero de julio de ese año.
Se trata de un profesional de gran prestigio en su país y a nivel internacional. Fue ministro de salud desde 2005 hasta 2012, cuando pasó a ocupar el ministerio de relaciones exteriores hasta 2016. Ese año fue propuesto para ocupar la dirección general de la OMS, cargo que ostenta hasta mayo de 2022, cuando deberá elegirse su sustituto.
Es biólogo y tiene otras especialidades médicas. Se le cuestiona su pasado político de izquierda, ya que fue miembro destacado del Frente de Liberación Popular de Etiopía, país del que figura como ciudadano.
El 28 de enero de este año visitó a China, decisión que le valió para recibir críticas de Estados Unidos, que cuestiona declaraciones suyas, consideradas parcializadas en favor del régimen asiático, al señalar que manejó adecuadamente los inicios de la enfermedad y su disposición a colaborar con ese organismo. Dijo que apreciaba la seriedad con la que se abordó el brote, el compromiso y la transparencia demostrada.
Durante su permanencia en China sostuvo encuentros con su presidente, Xi Jinping, los ministros de Exteriores y de Salud, para intercambiar informaciones del brote del nuevo coronavirus. Estuvo acompañado por el director regional del organismo y el director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias.
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Acordaron realizar nuevos estudios sobre la gravedad y la transmisibilidad del virus, en la continuación del intercambio de datos y compartir material biológico. Probablemente los funcionarios del organismo internacional ignoraban que, además de un manejo inadecuado del brote, se atribuye a las autoridades chinas desarrollar una feroz represalia en contra de los médicos que detectaron la presencia del letal virus,
Es normal que, en visitas protocolares como esa, se preste mayor atención a las informaciones e inquietudes emanadas de las autoridades oficiales, lo demás se oculta o, en el mejor de los casos, se maquilla.
Es evidente que el director de la OMS y algunos de los funcionarios del organismo han cometido errores, a emitir declaraciones alarmistas, como señalar que lo peor no ha pasado y que debemos prepararnos para una nueva oleada de la enfermedad, cuando su papel debe ser el de orientar a los países sobre la mejor forma de enfrentarla.
Parecería que la realidad conduce a volver a la vieja Oficina Internacional de Higiene Pública, pues todo apunta que la OMS requiere ser renovada e higienizada, pues anda por mal camino, ya que constantemente desde la entidad se produce un bombardeando de informaciones aterrorizadoras, como si de lo que se tratara es de infundir pánico en la gente, en vez de llevar confianza, en base a orientaciones menos alarmistas.
La OMS insiste en que el fin de la enfermedad está más lejos de lo que pensamos. Hans Kluge, director para Europa de la entidad, dijo: “Si la primera ola ha pasado, la cuestión clave es que hemos comprado el tiempo para prepararnos ante una segunda o tercera ola, particularmente si no hay vacuna”.
También el consejero médico del Reino Unido, Chris Whitty, dice que la salida a largo plazo es una vacuna. Y dale con la vacuna, parece que ese es el mayor interés de los que se aprovechan de las calamidades humanas para hacer negocios.
PRIMERA SEÑAL
Hay quienes afirman que las autoridades chinas tenían conocimiento de que, en la tercera semana de diciembre, en la ciudad de Wuhan, habían más de 50 pacientes afectados de una neumonía desconocida, pero muy parecida al SARS, que le afectó en 2002 y 2003.
Se afirma que varios de los afectados habían frecuentado el mercado de venta de pescados de la ciudad, pero que eso no fue comunicado a tiempo a la población, para que dejara de visitar el lugar y evitar la propagación de la enfermedad.
Se indica que, para el 25 de diciembre el doctor Lu Xiaohong, jefe de gastroenterología del hospital de la ciudad, mostraba sorpresa por la cantidad de médicos contagiados y también se atribuye a 8 galenos haber lanzado, el 30 de diciembre, una alerta sobre un “coronavirus similar al SARS”., lo que provocó que fueran sancionados.
Sin embargo, su denuncia obligó a las autoridades a comunicar una alerta oficial a la OMS el día siguiente, es decir, 31 de diciembre.
HÉROES CONTRA EL COVID-19
Se atribuye al oftalmólogo Li Wenliang haber detectado un virus muy contagioso, del que sé habría infestado a asistir a una paciente, situación que puso en conocimiento de sus colegas, entre ellos la doctora Fen, quien era su superiora en el centro asistencial donde ambos laboraban.
El médico habría advertido a colegas que debían usar mascarillas, lentes y guantes, para protegerse y evitar ser contagiados, como sucedió con él, a quien el virus le invadió su cuerpo a través de los ojos, provocándole la muerte. Se le considera una de las primeras víctimas del letal virus y un símbolo de la lucha contra la enfermedad.
Otra que, al parecer, pagó con su vida el haber asumido la decisión de informar la existencia del virus, es la doctora Ai Fen, directora del Hospital Central de Wuhan, quien enterada del peligro que se cernía sobre sus colegas y la población, dio cuenta a sus superiores, que en un primer momento la ignoraron y luego la recriminaron, ordenándole olvidar el tema.
Por el contrario, profundizó las investigaciones sobre los alcances del virus. Su decisión le llevó a ser sancionada, apresada y desaparecida, pues jamás se ha sabido de su paradero. Habría dicho: “Si hubiera sabido lo que iba a pasar, no me habría importado la reprimenda. Hubiera hablado con quien sea, donde sea”.
Otros silenciados, sancionados, unos y, desaparecidos otros, fueron varios científicos, periodistas, médicos, enfermeros, empresarios, abogados y blogueros.
China confirmó su primera muerte el 11 de enero y ese día, investigadores también filtraron lo que acontecía en la ciudad de Wuhan.
Dos días después, el 13 de enero, Tailandia se convertía en el primer país, fuera de China, que registró un caso y fue un turista llegado de Wuhan. A partir de entonces las cosas cambiaron para el mundo,
OJOS PELIGROSOS
Se atribuye a la enfermera Chelsey Earnest, el haber observado en Estados Unidos que varios pacientes, cuando acudían a buscar asistencia, tenían los ojos enrojecidos y que era un signo de que estaban infestados, amén de dar cuenta de que muchos de ellos murieron.
Esa versión fue corroborada por la Academia de Oftalmología, una de las entidades médicas más prestigiosas de Estados Unidos, la cual envió una alerta a sus profesionales sobre esa situación.
La enfermera expresó que “varios informes sugieren que el virus puede causar una conjuntivitis folicular leve¨ y que es posible se pueda contagiar por contacto de aerosol con la conjuntiva.
Dice que hubo pacientes que acudieron a oftalmólogos por conjuntivitis, pero mostraron también fiebre y síntomas respiratorios, como tos y dificultad para respirar. Partiendo de esas informaciones, la Academia y funcionarios norteamericanos recomendaron a los médicos proteger su boca, nariz y ojos al atender pacientes potencialmente infectados del virus.
PALABRAS Y MÁS PALABRAS
Mientras el COVID-19, diezma la población, algunos líderes mundiales desperdician su tiempo y potencial en una guerra de palabras, con discursos desafiantes y contradictorios que no contribuyen a frenar un mal para el que parece no existe freno.
China, Estados Unidos y la OMS integran un triángulo de tensiones en medio de la peor crisis humanitaria que se conoce, antagonismo del que la peor parte corresponde al organismo mundial, por su dependencia de uno y otro, de los asiáticos, porque ejercen gran influencia en el director y de los norteamericanos, porque son los que realizan el mayor aporte económico a la organización.
Ttump reclamó que, al ser su país el que más aporta al presupuesto de la OMS, merece mejor tratamiento y, primero amenazó con retenerle los fondos y, finalmente, dispuso no entregarlos. En respuesta los chinos hicieron un aporte de 30 millones de dólares como contribución extraordinaria para coadyuvar a su lucha contra el COVID-19.
Adhanom Ghebreyesus se volcó en elogios a los chinos y Trump citó esas expresiones como ejemplo sobre su supuesto parcialismo, al tiempo que le enrostró su reclamo para que se detenga la politización de la salud mundial.
El jefe de Estado norteamericano asegura que quien politiza a la OMS es su director, al inclinar sus actuaciones en favor de sus rivales, a los que acusa de haber creado el virus chino. Esas expresiones fueron rechazadas por China y amenazó con tomar represalias.
Como es costumbre en Trump, le sacó una pifia al director de la OMS, quien le habría aconsejado mantener abiertas las fronteras con China, pero dijo que “afortunadamente¨ rechazó su consejo.
SE BUSCA VACUNA
Aunque expertos salubristas se muestran pesimistas sobre el futuro de la humanidad, pues hay quienes aseguran que la gente tendrá que cohabitar con la enfermedad, por lo que existe una loca carrera por producir una vacuna y ya se habla de que hay varias que se están probando en humanos.
En esos esfuerzos participan científicos de China, España, Francia, Estados Unidos, Alemania, Inglaterra, Israel, Australia, Rusia y otras naciones, pero lo cierto es que mientras se desarrollan esas gestiones, las muertes avanzan cada día.
Preocupa que el precio del antídoto que se logre sea muy elevando, lo que le haría inaccesible para los pobres, por lo que la OMS y otras entidades tratan de lograr recursos para financiar los proyectos que buscan la vacuna, para que, una vez se tenga, sean destinadas a todos los que la necesiten.
Expertos internacionales anticipan que no hay garantía de que se pueda desarrollar una vacuna con éxito. En franca contradicción con la organización a la que les sirven, David Nabarro, profesor de salud global del Imperial College de Londres y representante de la OMS para la COVID-19 y María Van Kerkhove, jefa de la unidad de enfermedades emergentes de la misma organización, estiman que no será fácil lograr un antídoto.
Nabarro dice: “no apuesten por la vacuna para protegernos del COVID-19” y Van Kerkhove estima: “Esta va a ser la nueva normalidad para todos nosotros", en tanto, en crítica vedadas a la OMS, el ex secretario de salud del Reino Unido, Jeremy Hunt, dijo que la única forma de aprender de la pandemia es que las naciones acuerden un nuevo sistema de salud mundial con más cooperación internacional entre los gobiernos en materia de salud.
A su modo de ver, también es necesario que las naciones más ricas hagan más para apoyar los sistemas de salud de los países más pobres del mundo.
El comercio internacional ha puesto en marcha su tradicional manera de hacer negocios en base a la especulación o alteración de los precios de los productos de mayor demanda, como son respiradores, batas protectoras para el personal médico y de enfermería, mascarillas, guantes y otros insumos.
Una muestra de que todo gira en torno a negocios es que en República Dominicana se anunció que dos grandes empresas productoras de vacunas en el mundo unieron esfuerzos para acelerar la posibilidad de producir una vacuna ontra el COVID-19.
Sin dudas, el ambiente político que vive el país en medio de la enfermedad, influye en el accionar de las instancias oficiales y de los políticos de oposición, cada quien queriendo sacar provecho.
Desde el gobierno se toman acciones que parece buscan aterrorizar a todos, mientras se insiste en prolongar la cuarentena y el toque de queda, como quien trata de ganar tiempo o pescar el río revuelto, porque qué se busca con esa decisión?
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| Presidente dominicano, licenciado Danilo Medina Sanchez |
Toma fuerza la creencia de que no es casual la indiferencia oficial frente a los reclamos para que se convoque a una cumbre del liderazgo nacional, sin importar bandería política, ni fanatismo, para tratar de lograr un plan de consenso para frenar el coronavirus, pero nunca se ha visto interés o intención de materializar ese encuentro.
Como los políticos de oposición, particularmente los aspirantes presidenciales, ven que el gobierno los ignoraba, mientras el candidato oficialista se mantiene activo día y noche, aprovechando la circunstancia para ganarse el favor de la población, emprendieron una competencia para poner de manifiesto quien da más en medio de la tragedia.
Se afirma que funcionarios del gobierno tomen como un cheque en blanco la emergencia nacional para hacer y deshacer, al extremo de que varios concursos de compras han sido anulados y hasta destituciones se produjeron, por alegados actos de corrupción.
Tampoco ha funcionado aquello de que la unión hace la fuerza, pues todos tienen la vista puesta en las elecciones presidenciales y congresionales y, por eso se prefiere que los partidos y los candidatos accionen cada quien, por su lado, los de arriba tratando de quedarse y los de abajo, por alcanzar las escalinatas del Palacio Nacional. Se prefiere que cada quien accione por su lado.
