Mi ventana óptica Por Alejandro Almánzar A. Almanzar La historia de este personaje de la literatura inglesa sigue presente en los pueb...
Mi ventana óptica
Por Alejandro Almánzar
Por Alejandro Almánzar
A. Almanzar |
La historia de este personaje de la literatura inglesa sigue presente en los pueblos más de cinco siglos después, no es irreal, pero su creador se merece el reconocimiento por recrear a un personaje que enfrenta a los corruptos para defender a los pobres.
¿No recrea, pero en la vida real a este personaje Luigi Mangione, enfrentando a un monstruo de mil cabezas como la medicina en Los Estados Unidos? De sacrificio como el suyo la humanidad encuentra como solucionar sus agobiantes males, o por lo menos, el alivio de tan mortificante carga que llevamos a cuesta, cual espada de Damocles, de la cual, a pesar de su herida, ya ni la sentimos, aunque la llaga sea cada vez más pronunciada y dolorosa.
Como si eso se convirtiera en el sedante que nos lleva por la vida hacia un sufrimiento eterno, del que sólo con la muerte sabemos lo dura y pesarosa de esta existencia. Hablamos de Brian Thompson, gerente de UnitedHealthcare y Mangione, quienes por separado nos dejan una lección que falta por verse si la aprendemos.
El funcionario como víctima, no del “victimario” en sí, sino, del sistema que prefirió decidirse por la indiferencia ante el problema, que con este desenlace uno se pudra en la tumba y el otro en una cárcel. Pero algo sorprendente es el apoyo multitudinario recibido por el atacante del ejecutivo; como si la población se hubiese convencido de que era necesario sentar tan funesto precedente para detener un sistema donde se mercadea con la vida y salud de la gente, como si se tratara de una oferta y demanda en el comercio de mercancías.
Resulta peligroso ver a la sociedad asumir su defensa ante unas autoridades que abandonaron su rol, como diciéndoles, fueron ustedes que fallaron, que funcionarios e instituciones la dejaron a merced de la ambición de corporaciones insaciables provocando dicha reacción.
Que un joven brillante, con altísimo coeficiente intelectual haya sido empujado a actuar así, por falta de respuestas a sus reclamos es para reflexionar y para evitar que ese sentimiento de la población hacia el sistema se multiplique, a Mangione deben ir a hacerle compañía a la cárcel los responsables de lo que en ese sector salud viene ocurriendo desde hace tiempo.
Eso envía un mensaje contundente a las autoridades, de que él no está solo en su reclamo y que la falta de acción justifica su proceder. Esto encuentra más sentido con lo que expresó el jefe de detectives del Departamento de Policía, de Nueva York, Joseph Kenny, al declarar a un programa televisivo "que tuvo la oportunidad de leer el Manifiesto escrito por Mangione" donde explica lo que lo llevó a cometer el hecho.
Dijo, que el detenido denuncia el sistema de salud estadounidense como uno de los más caros del mundo y con una esperanza de vida menor a la de otras naciones desarrolladas, por eso nos preguntamos. ¿Tendremos en este muchacho al nuevo Robin Hood, capaz de asumir un reto como este para defender a esa mayoría explotada por el sistema de salud?.
Pero según The New York Times, citando a amigos de Luigi, éste vivía con un grave dolor de espalda y el año pasado se sometió a una cirugía. Pero también sale a relucir la situación de salud que enfrentó su progenitora, algo que afecta a millones de estadounidenses.
alex15958@hotmail.com
X, @laactualidadtv
You Tuve, @miventanatv
Tic Tok, @alejandroalmanzar470