Mi ventana óptica
Por Alejandro Almánzar
Vivimos probablemente un proceso sólo comparable a la Edad Media, dominados por los peores intereses terrenales, sectores oscuros que persiguen controlar el mundo mediante la más burda manipulación, donde la administración Biden rompió con las normas establecidas en nombre del nuevo orden mundial.
Eso poco importaría, si habláramos de la decisión unilateral de una nación, pero esto cambia, cuando buscan imponerse, obligarnos a pensar como un mismo y único cerebro, “porque tenemos que ser todos iguales", cuando lo único que somos es diferentes.
Esto ya toma un rumbo peligroso, abarcando hasta competencias deportivas, como lo sucedido en los Juegos Olímpicos, París 2024, el mundo fue escandalizado al ver una joven boxeadora italiana abandonar el combate a los 46 segundos, al sentir que enfrentaba la "igualdad de género" pero de forma desigual. Lic. Alejandro Almánzar
Ni hablar, cuando analizamos el atentado al expresidente Trump, en Pennsylvania, el 13 de julio, que por poco pierde la vida, dejando interrogantes sin respuestas para entender quienes sienten la necesidad de eliminarlo y ¿Por qué?
Aunque es bien sabido, el exmandatario no comulga con dicha agenda que encabeza Biden y sus socios, pero como sucedió todo, cualquiera pensaría que detrás de esto andan manos poderosas, capaces de cualquier aventura para evitar Trump vuelva a la Casa Blanca.
Desde cómo el tirador burló la seguridad a cargo del Servicio Secreto. Cómo subió al tejado portando un arma de guerra sin ser detenido, la penosa defensa que hizo la exdirectora Kimberly Cheatle, sin reparar que esto pudo desencadenar otra guerra civil en Los Estados Unidos.
Poniendo a los estadounidenses a preguntarse si una posición tan sensitiva puede ser ocupada por cualquier persona, sin importar el género. Y si el mérito para dirigirla se fundamenta en el tiempo dentro de la institución o cercanía con el presidente, pues de ser así, a estas personalidades que se proporcionen su propia seguridad y se olviden de un Servicio Secreto politizado y sirviendo a intereses macabros.
Por ahí circula un video mostrando a mujeres del Servicio Secreto desconcertadas con lo sucedido aquel día, sin saber de lo que se trata tan delicada tarea de cuidar a estas figuras. Trump, no es del agrado de quienes quieren imponer su agenda comprometiendo el Estado y debería cuidarse, recordando que Lincoln sufrió varios atentados antes del magnicidio en 1865.
Posiblemente, tampoco sea casualidad el aterrizaje de emergencia en Montana del avión que lo transportaba este fin de semana a otro mitin, dizque por "una falla mecánica”. Esto revela la peligrosidad de quienes quieren controlar a la humanidad.
La República Dominicana está impactada de la peor manera, sobre todo, porque al gobierno, ni los ciudadanos parece importarle su soberanía, que nos roben el presupuesto nacional para atender parturientas haitianas y que nuestras escuelas hayan sido entregadas a los hijos del vecino país obedeciendo la política de Washington.
Una población desconectada de la historia, temiendo ser etiquetada de xenófobo, ultraderechista y conservador, no es extraño entonces, que dice Listín Diario, en el hospital Calventi, de las parturientas que recibe, el 60% son haitianas, mientras Abinader se enfoca en reformar la Constitución para adjudicarse impunidad para él y la clase que representa.
No queda la menor duda, que la Covid 19 y la destrucción de la raza humana está contemplada en esa agenda 2030 que Trump rechaza.
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