Mi Ventana Óptica Por Alejandro Almánzar Con cada prueba que organismos internacionales les hacen al ...
Mi Ventana Óptica
Por Alejandro Almánzar
Con cada prueba que organismos internacionales les hacen al país, en muy pocas sacamos buenas notas. Sólo en aspectos negativos, como narcotráfico, crimen organizado, corrupción y la capacidad de hacer fraudes sobresalimos.
En pocos renglones mostramos avances, mientras en materia de institucionalidad, democracia, alimentación, salud y educación vamos como el cangrejo, hacia atrás, así lo revelan informes de instituciones que evalúan nuestro desempeño.
Lic. Alejandro Almanzar |
Pero la visión internacional sobre tantas debilidades no preocupa al gobierno, que sólo se enfoca en crear inestabilidad y descomposición en todos los órdenes, mientras intenta venderle una estela de espejismo al pueblo, muy distante a la realidad.
Lo que sí, avanza, es el método de funcionarios oficiales para cambiar su condición económica y social, empleando acciones antidemocráticas y retener el poder, aprovechando sus cargos para apadrinar a delincuentes del bajo mundo.
Danilo, resultó ser el peor fiasco presidencial de los últimos tiempos, porque nada de lo prometido para llegar al poder ha cumplido, demostrando, que las palabras de los políticos son de aire y se las lleva el viento, debilitando aún más al Estado.
Con un aparataje mediático, inició su mandato en 2012, proclamando llegada la hora de una revolución en Educación, y transparencia estatal, pero en ninguna administración hubo tanto desfalco como en la suya, y en Educación, el (Program for International Student Assessment) PISA) le da un cero.
Cuando Balaguer buscó elevar la calidad educativa, dije, eso se quedaría en puro intento, porque como decimos allá, la fiebre no está en la sábana, si no, en el cuerpo del paciente, que es donde se debe trabajar para erradicarla.
El Plan Decenal de Educación, fue un proyecto revolucionario, que buscaba fortalecer el viejo sistema de Hostos y Ercilia Pepín, pero sin profesores capaces de asumir ese nuevo reto, era como poner la Carreta delante de los bueyes y por eso fracasó.
El problema no era el viejo modelo, estancado por intereses políticos por casi un siglo, es la politiquería dentro de Educación, donde como en todo, no se evalúa calidad del educador, si no, su militancia política, llenando las aulas de docentes mediocres.
Danilo logró el 4%, lo recordamos recriminar a ingenieros delincuentes, que abandonan obras del Estado, y hasta nos hizo pensar, había una seria determinación de avanzar, tanto en infraestructuras, como en la calidad educativa.
Otro intento fallido son las llamadas (Tandas Extendidas), de lo que tanto el presidente se vanagloria, y esto sólo sirvió para retener a estudiantes allí por más tiempo, convirtiendo las escuelas en centros de cuidar niños y adolescentes.
El otro problema medular es, una mal llamada Asociación de Profesores, que respondiendo a intereses partidarios, se convierte en una retranca del desarrollo educativo nacional, realizando más jornadas de huelgas, que de docencia en las aulas.
El Estado les paga para que atrasen más a la sociedad, eso, unido a que cada gobernante fabrica su propio país, es lo que nos mantiene rezagados, y cuando creemos haber avanzado algo, tristemente nos encontramos en el punto de partida.
El Plan Decenal de Educación, nunca debió eliminarse, si no, reforzarlo, colocando los bueyes delante de la Carreta, adaptando el profesor al mismo, fue cuanto faltó para revolucionar la Educación dominicana, pero el tanto improvisar de políticos, nos tiene como el cangrejo, caminando hacia lo incierto.
Twitter, @alexalma09