Por JOSE FLANDEZ En Venezuela, país bajo el dominio de un régimen tercamente dictatorial coligado al terrorismo y al crimen orga...
Por JOSE FLANDEZ
En Venezuela, país bajo el dominio de un régimen tercamente dictatorial coligado al terrorismo y al crimen organizado, se está jugando al infantilismo al enfrentar a ese régimen de fuerza que actúa dando zarpazos de fiera acorralada o ejecutando acciones metódicas astutamente planeadas por gente experimentada en aplicar el terror y la aniquilación contra sus enemigos.
Con esa manera pacifica y románticamente democrática de enfrentase al perverso castro chavismo totalitario, y soñando con que militares corruptos del circulo que rodea a Maduro actuarían contra él, la oposición ha ido de fracaso en fracaso quemando sus líderes, los que han ido siendo inhabilitados, arrestados, sentenciados a largas condenas, habiendo algunos huido del país ejecutando escapes de película.
El último escape fue el de Leopoldo López refugiado en calidad de huésped en la embajada de España, quien el pasado 30 de abril fue liberado sorpresivamente de su arresto domiciliario por el SEBIN, cumpliendo ordenes de Guaidó, generando el hecho la destitución del jefe del organismo represivo, acusado por Maduro de ser un topo de la CIA.
López había sido sentenciado a casi 14 años de prisión tras un amañado juicio. Antonio Ledesma se fugó de su arresto domiciliario. Henrique Capriles, quien fue dos veces candidato presidencial fue inhabilitado y María Corina Machado despojada de una diputación e inhabilitada.
Otros prominentes y dirigentes medios han tenido que huir del país acosados por la represión, acusados y amenazados por el régimen, como Julio Borge antiguo presidente de la Asamblea Nacional y Carlos Vecchio cofundador de Voluntad Popular y actual embajador de Venezuela en Estados Unidos nombrado por el gobierno constitucional interino dirigido por Guaidó. También fue detenido el diputado Juan Requesens acusado de complicidad en el supuesto atentado con drones contra maduro
Enfrentar a una dictadura cívico militar de la envergadura criminal como la que dirige Maduro de la mano del castrismo, requiere no solo de la valentía mostrada hasta ahora por Guaidó, la mayoría de los opositores y principalmente el pueblo oprimido, sino de astucia y de la determinación necesaria para aniquilar al enemigo de manera contundente, aprovechando todas las opciones, tomando en cuenta de que si no lo haces tú en cualquier momento lo hará contigo la dictadura.
Maduro, si no se le pone fin a su régimen de manera urgente, irá paulatinamente aniquilando a cada uno de los líderes emergentes que vayan surgiendo de las filas de la valiente oposición venezolana, como lo ha venido haciendo de manera quirúrgica, no solo Maduro sino también Hugo Chávez desde el inicio de su dictadura. Eso estaba previsto desde siempre en la agenda del chavismo, siguiendo los postulados totalitarios del marxismo en su versión socialista del siglo 21.
Las detenciones del jefe de despacho y la del vicepresidente de la Asamblea Nacional, recientemente, Roberto Marrero y Edgar Zambrano, respectivamente, es prueba contundente de lo dicho anteriormente; lo que es una evidente advertencia de que se quiere ir desmantelando paso a paso el congreso legitimo para que solo prevalezca la ilegitima y dictatorial Asamblea Nacional Constituyente, férreo instrumento títere al servicio del dictador.
Eso demuestra que las sanciones impuestas por Estados Unidos, y las innúmeras manifestaciones masivas, hasta ahora no han intimidado al narco régimen, el que ha arreciado sus acciones represivas contra el entorno mas cercano de Guaidó, que próximamente podría ser el blanco de la embestida represiva, esto en la medida de las circunstancias, si estas favorecen que así se haga, tomando en cuenta el riesgo de una temida respuesta contundente de EU, la cual está siendo últimamente puesta en duda.
Esa dictadura criminal debe ser combatida con sus mismas armas. Guaidó tiene que redefinir su estrategia de lucha pacifica la cual no ha dado resultados definitivos. Es tiempo de solicitar ayuda militar extranjera, si es que esta está disponible, ya que localmente esa ayuda militar no se ha logrado conseguir de manera suficiente, solo de forma tímida e ineficiente sin iniciativas ofensivas.
Es la hora de la determinación…, un pueblo notablemente valiente y democrático está desesperado por reconquistar su anhelada libertad y estabilidad, violentadas por la narco dictadura comunista de Maduro y su banda de malhechores.
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